“La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales”.
El ministerio de adoración, tiene la hermosa labor de guiar la alabanza corporativa, respondiendo al gran amor que Dios ha tenido con su pueblo. Nuestros cantos son Cristocéntricos, con una teología sana y tienen conceptos doctrinales elementales para la fe del creyente.
Nuestra adoración es primeramente para:
Adoración es el reconocimiento, la atribución de gloria y de valor de Dios. Gracias al evangelio nuestros ojos han sido abiertos a esta gloriosa realidad, la realidad del valor infinito de Dios, entonces por ese conocimiento es que respondemos al valor que sabemos que Él tiene.